La Taberna Restaurante "Galafate", antíguamente "Mi Taberna", aunque siempre se la conoció con el nombre que ostenta ahora, es uno de los bares de Ciudad Real con mayor tradición cofrade. Prácticamente todas las procesiones pasaban por su puerta, pero los cambios de itinerarios realizados con la llegada de los nuevos tiempos y la transformación de muchos pasos a costal, ha hecho que la calle de la Estrella, donde se encuentra, quede relegada únicamente a contemplar los pasos de la hermandad del Silencio a altas horas de la madrugada. Muchos recordamos aún al famoso "Brocha", el músico-pintor, como él se autodefinía (lo mismo se arrancaba, delante de un paso, con una saeta que terminaba en un cuplé, para regocijo de unos pocos y enfado de muchos cofrades; que aprovechaba el paso de las cofradías, para limpiar algún que otro vaso de vino que dejaban llenos los parroquianos sobre la barra al salir a ver la procesión).
El local tiene un diseño medieval que recuerda a los antiguos mesones en los que se degustaban deliciosos asados y excelentes caldos de la tierra. Pues efectivamente, ese es su espíritu, con productos de gran calidad y mucha experiencia en el gremio, son destacables las chuletillas de cordero manchego lechal y su cocina tradicional manchega (pisto, asadillo, gachas, migas, duelos y quebrantos...), que sabe combinar perfectamente con la inclusión de mariscos y pescados de primera calidad.
Nuestra primera comida institucional la celebramos el miércoles de ceniza del 2013 en este restaurante y resultó totalmente satisfactoria. A los postres, Ramón Regaña, miembro de la sociedad, nos deleitó con unas extraordinarias torrijas que recordaremos de por vida. En la sobremesa nos acompañaron conocidos compañeros cofrades, en una animada tertulia, bañada con deliciosos licores y combinados que no creo preciso especificar por no aburrir al lector.
